A LGBTIFOBIA COMO AGENTE DA EXCLUSÃO ESCOLAR

Uma aposta no combate a essa fobia.

Resumen

Es común escuchar que las bromas y los chistes siempre han existido en la escuela y que esto no debe verse como prácticas de acoso. Sin embargo, las investigaciones desarrolladas (SEPULVEDA, 2012; FREITAS, 2010; JUNQUEIRA, 2014) en los últimos años muestran que tales acciones son formas de exclusión que involucran el contexto escolar. Estas opresiones pueden caracterizarse por continuos actos de abuso, ya sean físicos, verbales o materiales, en una relación desigual entre las x involucradas. Las LGBTIfobia son formas de acoso que se practican contra lesbianas, gays, bisexuales, trans, travestis e intersexuales y se configuran como prácticas excluyentes. A pesar del auge del tema, la LGBTIfobia no es solo un problema educativo, está presente en la sociedad en su conjunto. Por lo tanto, no solo le corresponde a esta institución tratar de resolver este problema, ya que también es social, ya que afecta la calidad de vida y el bienestar de todos los cubiertos. La escuela, muchas veces, y aquí hay que afirmar, que no todas son escuelas, porque cada una es diferente a la otra, no están exentas de reproducir tales fenómenos sociales contra grupos minoritarios, pero sobre todo es un espacio de educación y socialización. Sin embargo, no podemos dejar de analizar que las prácticas de exclusión LGBTIphobic que se dan en algunas de estas instituciones, como reproductoras de lo presente en la sociedad, necesitan ser discutidas en este artículo, ya que llevan al sufrimiento a muchos estudiantes LGBTIS+ (SEPULVEDA, 2012 y 2015).